Un matrimonio a prueba de divorcio

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En cualquier época y cultura el evento familiar celebrado con mayor unión, alegría y entusiasmo son los matrimonios, Sin embargo También desde siempre ha estado amenazado por problemas que terminan con la unión matrimonial como son el divorcio debido a situaciones como el adulterio, violencia, irresponsabilidad, vicios, quiero compartir con ustedes relatos sobre una boda celebrada en una ciudad llamada Canà en Galilea en Israel
JN.2:1-12. Narra una boda los invitados Jesucristo y sus discípulos. En ella ocurre el primer milagro donde el agua se convierte en vino esto da a entender que Dios le gusta especialmente las bodas y esta interesado en la familia. Lo que pudo haber sido una boda desastrosa se convierte en el inicio del Ministerio terrenal de Jesús
1.-Jesús es invitado Dios es tomado en cuente y por eso se evito el desastre de la boda.
2.-El vino se termino, pero como Jesús estaba presente el soluciono el problema. El pidió que llenaran unas tinajas de agua.
El agua es la sustancia más natural de la tierra como el matrimonio es la relación más natural del ser humano.
El pidió que llenaran las tinajas esto es decir Jesús nos pide colaboración y esfuerzo.
3.- El resto lo hizo Jesús convirtió el agua en vino de excelente calidad.
ESTO nos da la idea que al invitar a Dios a nuestro matrimonio tenemos la ventaja de que el sea parte importante de nuestra vida esta relación común puede transformarse en una relación excelente
Podemos concluir que el amor de Dios por las bodas y la familia tiene un sentido fundamental la pareja y el matrimonio fue la primera relación que Dios instituyo y es en ella que llega la bendición divina al orden social humano y a la familia. Por eso escuchamos decir al finalizar una boda Por lo tanto lo que Dios unido no lo separe el hombre .GENESIS 2: 24

LA DIRECCION DE DIOS PARA LA RELACION FAMILIAR

Efesios. 5:21. “Someteos unos a otros en el temor de Dios”. Si buscamos alcanzar la paz y unidad familiar, solamente esta se obtiene al seguir la dirección de Dios.

Ella se inicia con la sujeción y el respeto mutuo como integrante de la familia, además de la sujeción a Dios.

Al seguir la dirección divina, evitaremos relaciones desequilibradas caracterizadas por las demandas de una parte y la complacencia de la otra que trae consecuencias sicológicas negativas.

La dirección divina para las esposas es doble: sumisión y respeto. En relacion a la sujeción es someterse a la dirección del esposo en el matrimonio.

Además también dice a los esposos como debe ser ejercida la autoridad para obtener la sumisión de la esposa por medio de un trato delicado y amoroso.

El segundo requisito para la esposa es el respeto dentro y fuera del hogar, ante los hijos, amigos, familiares y todos los que los rodean.

La dirección o voluntad de Dios para el esposo es que ame a su esposa, así como Cristo amo a la iglesia e hizo un sacrificio hasta la muerte por ella. Esta una necesidad de amor y sacrificio mutuo, debe ser satisfecha por los esposos. El principal problema social que tenemos actualmente es el adulterio por dejar de lado estas necesidades de amor y sacrificio satisfechas, se buscan y tratan de satisfacer fuera del matrimonio y el hogar.

Pero cuando la pareja se esfuerza sinceramente a mantener este equilibrio exigido por Dios de la fidelidad mutua,amor, respeto, sujecion, honra, sacrificio, se logra llevar una relación como debe ser.

Si la pareja matrimonial mantiene el equilibrio que proporciona los fundamentos de Dios para el matrimonio, es más fácil mantener la relación armoniosa en el hogar, la educación, disciplina y honor, respeto de los hijos es mas facil de lograr.

Para los hijos la voluntad y dirección de Dios es el respeto y el honor a los padres, la obediencia con honor es una manifestación externa que resulta de un deseo interno de respetar la autoridad, posición de los padres. La disciplina amorosa es facil de aceptar por ser producto sugestiones y buenos consejos.

LA MAYORDOMIA RESPONSABLE

La responsabilidad “es una virtud esencial para desarrollarnos como persona, es el compromiso que permite asumir las acciones y consecuencias de nuestras decisiones”.
Según lo expresado podemos inferir que lo que hacemos va mas allá de lo individual, afecta por lo general a quienes nos aman y rodean.

Por otra parte Maxwell. (2002). define “La mayordomía es usar las cosas que tengo…y a mí mismo sabiamente para Dios”.

Tomando en consideración las definiciones anteriores podemos decir que la mayordomía responsable consiste “en dar el uso adecuado a todo cuando se nos ha permitido administrar en nuestra vida, la familia, posesiones materiales, talentos, ambiente, habilidades, tiempo y otras cosas más”.

La biblia en Génesis capitulo 1 y 2: señala a Dios como el creador de todo cuanto existe, por tanto él es el dueño, sin embargo el ha delegado a todas las personas, según su capacidad administrativa, una serie de recursos diferentes como tiempo, dinero, habilidades, para que cumplan el propósito encomendado en la vida, útil a Dios y a los semejantes.

Por lo tanto nunca se debe olvidar que se es administrador no dueño, al final se va a rendir cuenta sobre el uso dado a los recursos entregados.

En Primera de Corintios 4:2 dice: “Ahora bien, se requiere de los administradores que cada uno sea hallado fiel”. Por esta causa es necesario ser responsable, Dios juzgara individualmente, a todas las personas.

Para los cristianos, el juicio de Dios comenzara por la mayordomía. Debido a que Cristo llevo el juicio por los pecados ya y son justificados por la fe en el.

Cada día de vida es una hermosa oportunidad de vivir siendo buenos mayordomos, porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo.

Todos los días es necesario dar cuenta a Dios de nuestros actos asegurarnos que estamos siendo aprobados por el, buscar el aliento y consejo por medio de sus mandamientos y palabra.

Evita buscar solamente la aprobación y reconocimiento de los hombres, sino la más importante la de Dios.

Raisa. B. Linares
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